
Leemos en WWD.com que Nudie Jeans, la firma de denim sostenible nacida en Suecia en 2001 de la mano de la diseñadora de moda Maria Erixon (exempleada de Lee Europa), acaba de abrir una tienda de reparación de Jeans en Estados Unidos, concretamente en el 188 de Bowery, en Nueva York. “Para nosotros –asegura el CEO de la firma el CEO PalleStenberg- Nueva York es un lanzamiento emocionante, ya que nos está dando la oportunidad de dirigir y controlar nuestro propio negocio con una ventana al público en una de las mejores ciudades y países en el mundo”.

Aunque ciertamente esta es la primera tienda de reparación que la firma abre en Nueva York, Nudie Jeans ya cuenta con una veintena de tiendas que ofrecen este servico en el mundo, entre ellas otra en Estados Unidos –concretamente en Los Angeles- y una en nuestro país, en el barrio de Gracia de Barcelona. Según wwd.com, a lo largo de 2014 en todas estas tiendas se repararon más de 30.000 vaqueros y se prevé que a lo largo de 2015 esta cifra ascienda hasta los 40.000.
Siguiendo con la estricta política de sostenibilidad de la firma (de la que incluso podemos conocer el proceso y recorrido de toda la cadena de producción), el concepto de reparación de los jeans se basa en la premisa que, aunque su producto es de algodón ecológico de alta calidad y está elaborado con la mayor precisión y esmero posible, los jeans –inevitablemente- se acaban rompiendo. Entonces, la propuesta de la firma sueca es que en lugar de desecharlos por unos nuevos los llevemos a reparar con el objetivo de no sólo dar mayor durabilidad a la ropa si no de conservar una prenda junto a la que seguro hemos escrito muchas historias. Para incentivar el uso del servicio éste es completamente gratis y, como leemos en la web, si no contamos con la posibilidad de acercarnos a alguna de sus tiendas podemos solicitar –también de manera totalmente gratuita- un kit de reparación para hacerlo al más puro estilo DIY. ¿Te atreves?

Una muy buena práctica de retail sostenible que nos demuestra una vez más que la sostenibilidad en moda ya no es una tendencia de futuro si no que la tenemos aquí, a la vuelta de la esquina y que, simplemente por sentido común, ha llegado para quedarse.


